sábado, 1 de junio de 2013



Siempre me han dicho que para cambiar no hace falta irse de ningún lado, que no debes abandonar a la gente para ello.
Todavía no han entendido que no es así. Si cambias, la gente con la que estabas te abandona, y no al contrario. Nos esforzamos por hacer que una persona sea de una forma, y en cuanto cambia un poco, le acusamos y decimos que ya no es ella. Que ya no es la misma persona de antes. No nos damos cuenta, de que haciendo eso, solo conseguimos no conocer a esa persona que se esconde y que es la que de verdad quiere salir, la verdadera personalidad de esa persona.
A lo largo de mi vida, me han puesto obstáculos para ser quien tenía que ser. Nací con un molde, que aún no he conseguido romper. Y por eso, sé que no se le puede obligar a alguien a ser de una manera.
Hay que dejarla ser ella misma, ser feliz.
Algún día, no muy lejano, lograré mi sueño. Me iré de aquí, me iré a Estados Unidos, y viviré la vida que tanto llevo planeando.
Nunca podéis rendiros. Nunca podéis dejar que otra persona maneje vuestra vida. Es VUESTRA vida, y sois vosotros los que estaréis con vosotros hasta el fin de los tiempos. Solo se puede tener aquello que no puedes perder en un naufragio, y eso solo eres tu mismo.

3 comentarios:

  1. QUé bonito.... me encanta cómo escribes!

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  2. Tan precioso como siempre :) Sigue escribiendo así, realmente vales para ello.
    Pásate por mi blog cuando puedas, guapa, que tienes un premio :)

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